DISCURSO SUBSECRETARIO GENERAL OTAN EN PARÍS

DISCURSO DEL SUBSECRETARIO GENERAL DE LA OTAN EN LA ESCUELA DE GUERRA DE FRANCIA EN PARÍS SOBRE “APORTAR RECURSOS PARA UNA ALIANZA COHERENTE Y FIABLE”

Rose Gottenmoeller (Subsecretario General de la OTAN):

Muchas gracias, Manfred, por sus muy amables palabras.

Damas y caballeros, me siento muy halagada. Tengo el inmenso placer de encontrarme en Francia. Quiero expresar mi sincero agradecimiento a todos cuantos han organizado esta conferencia sobre recursos. Repito: estoy my contenta de estar en Francia.

Francia y OTAN cuentan con una larga tradición de trabajar juntos. Entendemos la importancia de hacerlo para salvaguardar nuestra libertad y seguridad y hemos desarrollado y puesto a punto los mecanismos que nos hacen tan efectivos como una alianza.

Con la Alianza sabemos cómo hablar entre nosotros, desarrollar un común entendimiento de las amenazas a las que nos enfrentamos y tomar decisiones basadas en el acuerdo. Sabemos cómo actuar juntos en campaña, aplicar normas comunes y practicar su aplicación en misiones o maniobras. Entendemos que, para el proyecto común a sacar adelante, todos tienen que compartir de modo justo la carga, aportar efectivo, capacidad y contribución, y todos sabemos lo fundamentales que son estos recursos. Agradezco sinceramente las cariñosas palabras esta mañana de la señora ministra porque expresan cómo ve Francia la cuestión de los recursos. Y tan importante fue su mensaje que creo que nos ha proporcionado un estupendo comienzo para hoy.

Es posible que parezca evidente pero sin los adecuados recursos no podemos garantizar nuestra seguridad. Sólo invirtiendo en nuestra seguridad, sabiendo que contamos con lo necesario en cantidad y calidad, podemos confiar en la disuasión y la defensa. Repito, un claro mensaje de Florence Parly sobre estos asuntos. Siempre es cierto y de especial importancia en unos momentos en los que padecemos crecientes amenazas de seguridad.

Una de ellas es una Rusia más agresiva. Durante los últimos años hemos sido testigos de un comportamiento cada vez más peligroso e inaceptable: su agresiva actuación en Ucrania; su reforzamiento militar desde el norte de Europa a Oriente Medio; su empleo de tácticas híbridas, ciberataques, desinformación, interferencia en elecciones democráticas; sus esfuerzos para socavar el orden internacional basado en las leyes; el uso ofensivo de un agente nervioso en Reino Unido, por primera vez en territorio OTAN. Por desgracia no hay indicios de que Rusia vaya a cambiar y, por tanto, la OTAN debe mantener su vía dual respecto de Rusia: disuasión y defensa fuertes con una continuada búsqueda de diálogo.

Pero no es éste el único problema. Desde los ataques del 11 de septiembre contra EEUU la OTAN ha estado en primera línea así como contra el terrorismo. Cientos de miles de nuestros soldados han combatido codo con codo en Afganistán. Muchos han rendido su último sacrificio incluyendo más de 80 franceses. Rindámosles honores.

Veos también inestabilidad y turbulencias en el norte de África y Oriente Medio, llevando a algunos a cometer actos de violencia y a otros muchos a huir para salvar sus vidas dando lugar a la mayor crisis de refugiados y emigrantes durante décadas. Una vez más OTAN se está esforzando en proyecta estabilidad en esos países, porque si los vecinos están más estables entonces estaremos más seguros.

En la Cumbre de Bruselas, en julio, se adoptó la decisión de aumentar nuestra seguridad incluyendo el combate al terrorismo. Para impedir el regreso de ISIS hemos iniciado una nueva misión de instrucción en Iraq para crear academias militares profesionales para sus tropas. También hemos acordado aumentar nuestro apoyo a Jordania y Túnez, reforzar su capacidad de combatir al terrorismo. En julio se acordó también incrementar nuestra disuasión y defensa con una nueva iniciativa de disponibilidad, los “Cuatro Treintas”: 30 batallones mecanizados, 30 escuadrones de aviones y 30 barcos de guerra listos para actuar en 30 días o menos. Varios aliados han ofrecido su cibercapacidad a OTAN y los aliados se esfuerzan conjuntamente para frustrar ciberataques.

Estamos actualizando nuestra estructura de mando con uno nuevo para el Atlántico con base en Norfolk, junto con ACT en EEUU y otro nuevo en Ulm, Alemania, de apoyo y logística. Ambos mandos ayudará a la mayor movilidad de nuestras tropas posibilitando el rápido refuerzo por la alianza y Europa, asegurando contar con las tropas adecuadas en el lugar y momento adecuados. También debemos asegurar que están en la mayor disponibilidad.

En los últimos años OTAN y UE han logrado un grado de cooperación sin precedentes, trabajando juntos en cuestiones tan diversas como seguridad marítima, contrarrestar la guerra híbrida y el terrorismo. Intercambiamos información en tiempo real sobre ciberataques, creciente participación e las maniobras de cada uno, incluyendo en este mismo mes las denominadas maniobras PACE de la UE. Áreas tan críticas de tratar por la desinformación que fluye constantemente en esta, yo diría, situación de guerra híbrida.

Estos son los pasos que se están dando para asegurar, en momentos de creciente inestabilidad, la seguridad de nuestra gente. Pero esto no es gratis. Por eso, en 2014 los aliados acordaron dejar de recortar el gasto de Defensa y aumentarlo gradualmente hasta un 2% del PIB. En la Cumbre de Varsovia reafirmamos este compromiso de inversión y de nuevo firmemente en la de julio en Bruselas con un renovado sentido de urgencia y de propósito. Hemos logrado un progreso significativo; 2018 será el cuarto año consecutivo de aumento del gasto de Defensa. Este año los aliados europeos y Canadá han aumentado su gasto combinado de defensa en más de un 5% hasta un 5,2%, el mayor aumento en términos reales en un cuarto de siglo. Los dos últimos años esos mismos países han gasta 41.000 millones más de dólares en Defensa, cosa significativa. Sin embargo, todavía queda mucho camino por recorrer. Vamos en la dirección correcta pero es mucho más lo que hay que hacer.

Cada país está comprometido ahora en desarrollar planes nacionales fiables sobre cómo lograr el 2%. Los aliados comunicarán esos planes a final de este año y, cuando los ministros de Defensa se reúnan en febrero informarán. Me alegro mucho de que, en la víspera de su Fiesta Nacional, el presidente Macron y el parlamento de Francia hayan firmado su compromiso del 2% en los próximos presupuestos de Defensa. Una vez más Francia da ejemplo.

Pero la cuestión no es sólo dinero. También hay que ver cómo se gasta, la capacidad que se obtiene con él y nuestro compromiso de usar esa capacidad para proteger nuestros países y habitantes. Nuevamente me alegro de la claridad de la ministra Parly y sus observaciones de hace un momento.

Además de los esfuerzos de los países la financiación común continúa siendo una expresión vital de la solidaridad y cohesión de la Alianza. Puede ser relativamente pequeña comparado con el gasto total pero la financiación común tiene un importante efecto multiplicador que nos capacita para sostener nuestra estructura de mando, nuestros sistemas comunes, tales como AWACS y el nuevo sistema de vigilancia terrestre de la Alianza (AGS), y mejorar nuestra interoperabilidad mediante inversiones en mando, control y comunicaciones.

El nuevo modelo de gobernanza para la capacidad financiada comúnmente, respaldado en la Cumbre de Bruselas en julio, es un paso clave hacia adelante. Sé que ha llevado tiempo llegar a un acuerdo a este respecto y todavía queda por hacer pero es un buen ejemplo de lo que se puede lograr preocupándose de pensar en nuevos modos.

Damas y caballeros, según nuestra situación de seguridad se va haciendo más compleja y menos previsible, necesitamos aumentar los recursos que comprometemos para nuestra defensa, hacer más con esos recursos para que nuestra defensa siga siendo coherente y fiable. Ustedes, nuestra comunidad de recursos, tiene un papel fundamental en apoyo de la adaptación de nuestra Alianza, atender las amenazas que padecemos. Les pido usar su profundo conocimiento, su excelente experiencia, su imaginación, por supuesto, para ayudar a ese proceso en marcha de adaptación en los años y décadas venideros. Con demasiada frecuencia la gente piensa en los recursos en términos de restricción solamente pero también son motivo de oportunidad, incluyendo la Alianza. Por tanto, en sus reuniones en París, en su trabajo o en cualquier otro sitio, les urjo a aceptar la oportunidad de ayudarnos a salvaguardar la libertad y seguridad de los casi mil millones de habitantes de la Alianza.

Así pues, muchas gracias por darme la oportunidad de hablarles. Les deseo lo mejor en una conferencia satisfactoria y espero los resultados de sus debates.

Muchísimas gracias.

NATO Update 16 de octubre de 2018

Por la trascripción:

Leopoldo Muñoz Sánchez

Coronel de Intendencia ET (R)