31 de enero, SAN JUAN BOSCO, patrón de los Especialistas de ET

AME felicita a todos los Especialistas del Ejército de Tierra por la celebración de su Patrón, SAN JUAN BOSCO, el 31 de enero.

Un recuerdo especial y una oración para aquellos que cayeron en el cumplimiento de su deber y los que nos han abandonado en este año

Antecedentes          ___________________________________________________

             Los días 27 y 28 de noviembre de 1.998 se celebró en la Residencia de Navacerrada (Madrid) el I Seminario sobre el Cuerpo de Especialistas para tratar aspectos del referido Cuerpo. Entre otros,  se puso de manifiesto la conveniencia y necesidad de contar con un Patrón específico que pudiera servir de elemento aglutinador y generador del espíritu del Cuerpo.  En la elección se valoraron las tradiciones existentes, atendiendo a conservar aquél con el que existía una identificación mayoritaria del personal integrante del Cuerpo de especialistas, ya que la mayoría de ellos habían sido alumnos de los IPE,s; Centros que veneraban a San Juan Bosco, patrón de las Escuelas de Formación Profesional, al impartirse en éstos dichas enseñanzas. Tras la consiguiente propuesta, atendida por la Superioridad, el 24 de enero de 2000, en telefax del JEME de Rfª 516AL, número 00665157, se comunica a este Centro la  designación oficial de San Juan Bosco como Patrón del Cuerpo de Especialistas del Ejército de Tierra de España, aprobado en Acta por el Arzobispado Castrense de España.

Biografía de San Juan Bosco

 Juan BOSCO, sacerdote italiano (Becchi 1.815 – Turín 1.888). Ordenado sacerdote en 1.841, inmediatamente se preocupó por la suerte de los niños pobres de los arrabales de Valdocco; a partir de 1.842 reunió una veintena de estos muchachos  y formó el llamado “Oratorio”, que en 1.846 contaba ya con 300 niños.

Posteriormente, estableció las bases de los sacerdotes de San Francisco de Sales o salesianos (1.851), que fue aprobada por el Papa Pío IX en 1.860. Paralelamente, fundó también la Congregación de las hijas de María Auxiliadora, llamadas salesianas (1.862). Estas instituciones, dedicadas especialmente a la educación y la formación profesional de los niños pobres, se desarrollan rápidamente. Juan Bosco, que a pesar de su canonización (año 1.934) ha conservado el nombre popular de Don Bosco, siendo uno de los grandes educadores del siglo XIX, celebrándose la fiesta en su honor el 31 de enero. Es el Patrón de las Escuelas de Formación Profesional

 

     SAN JUAN BOSCO PATRON del  CUERPO DE ESPECIALISTAS

 El 24 de enero del año 2000 en comunicación del Jefe del Estado Mayor del Ejército se designa oficialmente a San Juan Bosco como Patrón del Cuerpo de Especialistas del Ejército de Tierra tras su aprobación en el correspondiente Acta,  emitida por la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramento, y sancionada  por el Excelentísimo Señor D. José Manuel Estepa Llaurens, Arzobispo Titular de Itálica y Arzobispo Castrense de España, acogiendo el común deseo de los fieles militares católicos pertenecientes al referido Cuerpo, y como  muestra de su especial predilección por dicho Santo, quien empleó todas las energías en la educación de los jóvenes y fundó Congregaciones para instruirlos en los oficios y la vida cristiana.

 

Quién es San Juan Bosco

San Juan Bosco fundaba en Turín (Italia) el Oratorio-Centro Juvenil, la Casa de marginados jóvenes y la Escuela Profesional, que ha dado a la Iglesia y a la sociedad hombres de muy especial calidad, extraídos de las clases populares… D. Bosco es, entre tantos santos, un personaje sin igual. Tiene la independencia, la obstinación y el humor de la gente del Piamonte, y ese humor contra sí mismo que es la flor del humor… Quizás nunca como él lo natural y sobrenatural estuvieron más unidos de forma tan exquisita. Los cuidados que nosotros nos tomamos para concentrarnos o en el estudio o en el trabajo, los tomaba él para divertir y entretener a los demás, pues si los éxtasis, los sueños, las voces de Dios le arrebataban, el santo, muy concreto, escribía sus obras de teatro, piezas musicales, folletos, revistas y periódicos, libros de historia y de aritmética y hasta recetas de cocina y jugosos calendarios. En todo era alegre y razonable… Hacía grandes proyectos y no tenía otra pasión que la de estar en contacto con los chicos: en las plazas, en los mercados, en los solares, en las tabernas, en las fiestas piamontesas… San Juan Bosco, San Juan Bosco, trepaba, charlaba, silbaba, cantaba, rezaba, era. Era amor para los chicos marginados y las clases necesitadas. Era el alma, la música, el corazón de los demás.. Desde pequeño embelesaba a chicos y grandes con sus trucos y pasatiempos, para después enseñarles el catecismo. Confidente de de los papas Pío IX y León XIII, amigo de ministros laicos como los padres del Risorgimento político italiano, Cavour o Ratazzi. Se rompió la vida por todos. Hubo quien le miró con lupa, pero ni la lupa quitaba a San Juan Bosco su buen humor, sus aficiones, su entrega… a la juventud y a las clases populares dentro de la Iglesia…

Pero el 31 de enero de 1888 San Juan Bosco,  de los salesianos y de la gran Familia Salesiana, expiraba en las primeras horas de ese diá a la setenta y dos años y cinco meses. . Moría de la única forma decente de morir: de su propia vida. Dos días antes de morir, entre el dolor y el delirio, los salesianos le llegaban a oír: “Decid a mis muchachos que les espero a todos en el paraíso”.

Si la salvación de las almas, en general, y más en concreto la salvación de la juventud habían constituido la preocupación de toda su actividad a lo largo de su vida, ahora, a punto de despedirse de este mundo, rogaba con insistencia a los suyos que prosiguieran en la misma tarea:“¡Adelante, siempre adelante!