“COMPAÑERISNO DESPUÉS DEL SERVICIO MILITAR”

Reencuentro 30 años después de la ‘mili’

Estuvieron en Ceuta en el año 1993 en el cuartel de Caballería Montesa 3 l En su visita, rememoraron este lugar con tantos recuerdos que comparten

Imágenes cedidas
Ceuta ha vivido un reencuentro muy especial este fin de semana con la llegada a la ciudad de una veintena de personas que realizaron el servicio militar obligatorio entre mayo de 1993 y febrero de 1994 en el cuartel de Caballería Montesa 3.

Hace justo 30 años que pasaron nueves meses de convivencia en este lugar y aunque cada uno volvió a su destino, con el paso de los años lograron volver a reunirse para seguir recordando viejos tiempos.

Mientras estaban en el servicio militar, Gregorio Taboada apuntó los teléfonos fijos de todos sus compañeros. Después, vino la despedida de Ceuta y el paso del tiempo, hasta que en el año 2016, hablando con otro compañero, Lozano, con el que tenía contacto de forma más asidua, “me picó y me dijo: ‘y si montamos un grupo de WhatsApp?”.

Así, poco a poco, empezó a llamar a los números que tenía guardados desde hace años y finalmente logró dar con ellos. El 11 de mayo de 2017 el grupo de WhatsApp al que empezaron a unirse los compañeros que realizaron la ‘mili’ juntos era una realidad.

Cuando ya encontraron a unos 30 miembros, Plaza y Sánchez, entre otros, ayudaron a localizar al resto de los compañeros gracias a las nuevas tecnologías y los grupos de Facebook.

Una vez todos localizados, decidieron hacer una primera quedada en Madrid, ya que cada uno era de una punta del país. Eso fue en el año 2017. “A mí se me ocurrió que cuando estamos en un sitio tenemos que decir cuál va a ser el próximo para que no se pierda la amistad”, expresa Taboada.

De este modo, la segunda quedada también se cumplió. Fue en Sevilla un año más tarde. La siguiente volvió a ser en Madrid y la cuarta ha sido este año en Ceuta, aunque debería haber sido el pasado 2020 pero la pandemia obligó a aplazar este encuentro entre hermanos.

Y es que, según manifiesta Taboada, “en la mili se decía ‘hermanos’ y hace poco cuando escuché la canción de ‘La muerte no es el final’, que dice ‘cuando la pena nos alcanza por un hermano perdido’, digo es verdad. Y lo comprendí después de mucho tiempo. Lo mejor de haber hecho la mili es que no te sientes solo. Vayas donde vayas, tienes un hermano ahí”.

Respecto a la visita a Ceuta, cabe destacar que Miralles, un ceutí integrante del grupo, ha sido el encargado de organizar la parte “logística” de esta cita en la ciudad autónoma, aunque no pudo acompañar a sus compañeros debido a un accidente que sufrió recientemente.

Los antiguos militares cogieron el barco a las 10.00 horas del sábado, algo que les hizo “recordar al primer día, aunque con la diferencia que uno iba solo pero ahora quedamos todos para ir, menos uno que fue el día antes en moto”, cuenta Taboada.

Llegaron a Ceuta para estar a las 12 del mediodía en el cuartel de Caballería Montesa, donde les recibieron. “Fue espectacular, superó todas las expectativas de todos nosotros”, pone en valor.

Además de recorrer las instalaciones, que apenas habían cambiado, y de viajar en el tiempo a su época de la ‘mili’, también vivieron un momento muy emotivo ya que rindieron homenaje a un compañero de Coria, Cáceres, que había fallecido por una enfermedad.

 

Él tomó parte en la construcción de uno de los monolitos que se dejan ver en el cuartel y sus compañeros no perdieron la ocasión de dedicarle unos minutos, con todos los honores, todos firmes, a la vez que colocaron una imagen suya en este lugar y una placa en el que escribieron unas dedicatorias.

La visita en el cuartel terminó con un aperitivo en la pérgola donde entonaron la canción de caballería, algo que no estaba previsto, sino que surgió de forma espontánea.

La jornada continuó con una visita por la ciudad, con una comida en el restaurante Oasis, un paseo por el Monte Hacho, unos camperos en ‘Bocatas Jose’ y unas copas en el pub Edén.

Así, estos compañeros vivieron una jornada de reencuentro en el lugar que les unió para toda la vida. Ya están pensando en la próxima quedada, que será en Valladolid. Mientras tanto continuarán recordando vivencias pero con la cuenta atrás en marcha para sumar nuevos recuerdos juntos.