DECLARACIÓN DEL CONSEJO DEL ATLÁNTICO NORTE SOBRE LA ENTRADA EN VIGOR DEL TRATADO DE PROHIBICIÓN DE ARMAS NUCLEARES

Reafirmamos nuestro compromiso con el mantenimiento y refuerzo del control de armamento, el desarme y la no proliferación. Cuando el Tratado de Prohibición de Armas Nucleares, o tratado de prohibición, está próximo a entrar en vigor, reiteramos colectivamente nuestra oposición al mismo porque no refleja la situación de seguridad internacional cada vez más peligrosa y está en desacuerdo con la actual arquitectura de no proliferación y desarme.

El control de armamento, el desarme y la no proliferación han supuesto, y deberían haciéndolo, una contribución fundamental al logro de los objetivos de seguridad de OTAN. Los aliados, individual y colectivamente, han hecho su parte desde hace ucho y continúan apoyando una serie de iniciativas que ofrecen un progreso real sobre el desarme nuclear con medidas tangibles y efectivas. Continuamos apoyando el objetivo último de un mundo sin armas nucleares, completamente de acuerdo con el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (NPT), incluyendo su Art. VI, de un modo cada vez más efectivo y verificable que promueva la estabilidad internacional y se basa en el principio de seguridad completa para todos. NPT sigue siendo la única vía creíble al desarme nuclear. Reconocemos los compromisos suscritos bajo NPT en las cinco décadas desde su entrada en vigor y estamos resueltos a contribuir al mantenimiento, universalización y total implantación del mismo. La próxima Conferencia de Revisión de NPT supone una importante oportunidad para la comunidad internacional a este fin. Por otra parte, el tratado de prohibición carece de cualquier mecanismo claro de verificación y no ha sido firmado por ningún país que posea armas nucleares, por lo que no resultará en la eliminación de una sola arma nuclear. Corre el riesgo de socavar la arquitectura de no proliferación y desarme mundial con el NPT en su fundamento durante más de 50 años y el régimen de Salvaguarda IAEA que lo apoya.

OTAN es una alianza defensiva. El propósito fundamental de su capacidad nuclear es mantener la paz, prevenir la coerción y disuadir la agresión. Un mundo en el que haya países que desafían el orden internacional basado en la ley, cosa que no hace OTAN, no es un mundo más seguro. Mientras exista armamento nuclear OTAN continuará siendo una alianza nuclear. Los aliados están determinados a asegurar que su disuasión nuclear seguirá siendo segura y efectiva y rechaza cualquier intento de deslegitimar tal disuasión. No aceptamos ningún argumento que refleje el tratado de prohibición ni de otro modo contribuya al desarrollo de las leyes internacionales. El tratado no cambiará las obligaciones legales de nuestros países respecto del armamento nuclear. Pedimos a nuestros socios y otros países que reflexionen de modo real en el impacto del tratado sobre la paz y seguridad internacionales, incluyendo NPT, y se nos unan para la mejora de la seguridad colectiva a través de medidas tangibles y verificables que puedan reducir los riesgos estratégicos y haga posible un progreso real sobre el desarme nuclear.

NATO Press Release, 15 de diciembre de 2020

Por la trascripción:

Leopoldo Muñoz Sánchez

Coronel de Intendencia ET (R)