Una juez falla que a la calle de Caídos de la División Azul no le afecta la Ley de Memoria

El Juzgado Contencioso-administrativo número 8 de Madrid ha anulado el cambio de nombre de la calle de Caídos de la División Azul, al entender que su modificación por parte del Ayuntamiento de la capital en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica no se ajusta a derecho. 

 Considera que la creación de este cuerpo expedicionario, que luchó en Rusia del lado del Ejército nazi, es posterior a la Guerra Civil y, por lo tanto, no exalta la sublevación militar de 1936.

El gobierno municipal de Ahora Madrid, coalición liderada por Podemos, recibió ayer su primer varapalo judicial sobre su política de memoria histórica. El fallo, fechado el viernes pasado, argumenta que la División Azul se formó en 1941, dos años después de finalizar la Guerra Civil, y que “no entra por tanto en el periodo de exaltación de la sublevación militar (1936), ni de la Guerra Civil”, que es al que se refiere la normativa vigente. El juzgado madrileño da así la razón a José Luis Marín, que interpuso el recurso en representación del Colectivo de Familiares de Caídos en Rusia.

Ayer, el Ayuntamiento aseguró que recurrirá la decisión judicial, para lo cual tiene un plazo de

15 días. El equipo de la alcaldesa, Manuela Carmena, entiende que mantener el nombre de Caídos de la División Azul es “incompatible con los valores ciudadanos y democráticos que debe reflejar el callejero de Madrid del siglo XXI”. Su propuesta era sustituirlo por el de calle del Memorial 11 de marzo de 2004.

La juez Ana Monreal negó, sin embargo, que el nombre de Caídos de la División Azul suponga “una exaltación colectiva que contribuyó manifiestamente al mantenimiento y adhesión de la dictadura, resultando que los caídos de la División Azul estuvieron singularmente vinculados al régimen franquista de manera activa y significativa”, según recoge la agencia Efe. La magistrada añade que los caídos de la División Azul “no realizaron acciones o conductas exaltando la rebelión militar, ni la Guerra Civil, ni participaron en la represión, ni mucho menos fueron instrumento o soporte de sostenimiento del sistema dictatorial implantado por Franco”.

El cambio de nombre de esa calle fue propuesto por el Comisionado de la Memoria Histórica, un organismo dirigido por la abogada Francisca Sauquillo y formado por seis historiadores y escritores. El pleno aprobó en abril de 2017 la modificación del nombre, junto a otros 51 de plazas y vías de Madrid. Pero, según la juez, el argumento esgrimido por el Comisionado (habló de “unidad de voluntarios” que luchó contra la Unión Soviética “entre 1941 y 1943”) revela que no es aplicable a los dictámenes de la Ley de Memoria.

En caso de querer suprimir el nombre de esta calle, el Consistorio deberá hacerlo mediante la ordenanza reguladora de la denominación y rotulación de espacios urbanos y no en aplicación de la memoria histórica, indica la sentencia. El juzgado da así la razón al Colectivo de Familiares de Caídos en Rusia, que argumentaba que la División Azul nació con la “única y exclusiva razón” de “combatir el comunismo” y que sus miembros no estuvieron relacionados con el Holocausto ni fueron acusados de crímenes de guerra.

  • 11 abr. 2018  El País  L. C., / LUIS SEVILLANO Madrid