Muface sufrió dos paradas cardiacas y, tras un gran esfuerzo, hemos conseguido mantenerla con vida
El modelo de Muface necesita evolucionar y su futuro pasa por dos principios esenciales: corresponsabilidad y soluciones compartidas. La sanidad privada ha sido un pilar clave en el funcionamiento de Muface. De forma silenciosa, constante y eficaz, los hospitales y clínicas privadas han contribuido a garantizar la atención sanitaria de calidad a más de un millón y medio de mutualistas. Lo hemos hecho desde la convicción de que la colaboración entre sectores –público y privado– es no solo posible, sino necesaria para la sostenibilidad del sistema y el bienestar de los ciudadanos. A lo largo de los años, los hospitales privados han atendido urgencias, realizado intervenciones quirúrgicas, diagnósticos y tratamientos de alta complejidad. Esta labor, desarrollada desde el terreno asistencial, ha contribuido a la estabilidad y prestigio del modelo.
En este contexto, resulta natural plantear una evolución del marco de diálogo y toma de decisiones que dé cabida a todos los actores implicados. Muface ha estado en la UCI, sufrió dos paradas cardiacas de las que hubo que rescatarla y, tras un gran esfuerzo, hemos conseguido mantenerla con vida. Pero ahora es momento de darle oxígeno para que sus pulmones puedan volver a respirar adecuadamente.
La experiencia acumulada por la red hospitalaria privada permite aportar una perspectiva operativa sobre los retos del modelo. No se trata solo de cifras, sino de comprender qué se necesita para mantener una atención excelente: desde la dotación tecnológica hasta la estabilidad de los equipos profesionales. Una visión compartida puede contribuir a construir un modelo más equilibrado y sostenible para todos. En los últimos años, el sector hospitalario ha demostrado una gran capacidad de adaptación y resiliencia. Hemos invertido en infraestructuras, ampliado horarios, creado unidades específicas y reforzado plantillas para responder a las necesidades de los mutualistas. Especialmente en momentos de gran exigencia, como la pandemia, fuimos capaces de reaccionar con agilidad y responsabilidad, integrándonos con el resto del sistema sin distinciones.
Por ello, creemos que ha llegado el momento de consolidar esa colaboración para reforzar la eficacia y estabilidad del modelo. La participación de los prestadores asistenciales en el diseño de los futuros conciertos permitiría alinear mejor las necesidades clínicas con las condiciones económicas y organizativas, redundando en beneficio directo para los mutualistas. En ningún caso se trata de desplazar el papel del aseguramiento. Al contrario: nuestra voluntad es sumar, aportar conocimiento técnico y reforzar una estructura que ha funcionado durante años gracias al compromiso de todas las partes implicadas.
El sistema de Muface es un ejemplo singular dentro del panorama sanitario y su fortaleza reside precisamente en esa capacidad de integrar actores diversos en torno a un objetivo común: ofrecer una atención sanitaria excelente. Nuestra propuesta es clara: consolidar un modelo de colaboración público-privada maduro, basado en la corresponsabilidad, el respeto mutuo y la eficiencia, un modelo en el que la voz de los prestadores sanitarios privados no sea solo escuchada, sino integrada de manera estructural en los procesos de toma de decisiones. Y hacerlo desde una convicción constructiva: sumar siempre es mejor que excluir.
Los mutualistas merecen una atención excelente, con tiempos de espera razonables, acceso a tecnología puntera y profesionales preparados. Todo eso es posible si el modelo cuenta con una base sólida, donde cada parte asuma su responsabilidad y pueda desarrollarla con los recursos y condiciones adecuados. Estamos convencidos de que ese objetivo es compartido por la Administración, por las aseguradoras y por el conjunto del sistema. Por eso, desde la sanidad privada reiteramos nuestra disposición plena a colaborar, a aportar conocimiento técnico, a participar en el diseño de un modelo que nos pertenece a todos y del que dependen millones de ciudadanos. En definitiva, se trata de evolucionar hacia un marco más inclusivo, más realista y sostenible. Un marco que reconozca el valor de la colaboración y refuerce la confianza entre todos los actores. Ese es el camino que proponemos. Y en ese camino estamos listos para seguir trabajando.
CARLOS RUS CARLOS RUS ES PRESIDENTE DE LA ALIANZA DE LA SANIDAD PRIVADA ESPAÑOLA
Fuente:
https://lectura.kioskoymas.com/abc/20250709