LA VOZ DEL LECTOR
De cuando el General Franco advertía en 1967 al Presidente de los Estados Unidos Lyndon B. Johnson sobre el rearme de Marruecos y los riesgos para la paz y la seguridad de Españ
Ahora que estamos viendo cómo Marruecos se rearma por todos los lados, especialmente por parte de Estados Unidos e Israel, amenazando la paz y la seguridad nacional de España, es momento de recordar la carta, ya “desclasificada” por la Secretaría de Estado estadounidense, que en 1967 le envió el General Franco al Presidente de los Estados Unidos al objeto de evidenciar los riesgos para la paz que supone el rearme de Marruecos.
Ya que ahora carecemos de todo tipo de influencia en el área internacional, y ante el agravamiento de la escalada de tensión por las hostilidades del Reino Alauita contra España, es importante que miremos atrás y que percibamos de qué manera y en qué términos en aquel año se dirigía el Jefe del Estado español al estadounidense, para comprender que ahora estamos mucho peor que entonces.
Gracias a un documento desclasificado por el Departamento de Estado de la Nación norteamericana, podemos saber que el General Franco advirtió de forma urgente y directa al Presidente de los Estados Unidos de los siguientes riesgos para la paz en la zona:
– Que en la anunciada visita oficial que próximamente iba a realizar el Rey de Marruecos (Hassan II) a los Estados Unidos iba a ir acompañado por su Ministro de Asuntos para Mauritania y el Sáhara, además acompasado con una campaña propagandista de reivindicaciones anexionistas de territorios contra sus vecinos de Argelia, Mauritania y España, lo cual trasladaba un intento de implicación estadounidense en dichas pretensiones, de lo que se prevenía al máximo dignatario estadounidense.
– Ninguna de las otras partes afectadas (Argelia y Mauritania) cederían en sus derechos sobre los territorios pretendidos por Marruecos, y en cuanto a los derechos de soberanía de España sobre el Sáhara estaban tan claros como la lealtad de los saharauis (26.000 habitantes) a España y el valor geoestratégico de dicho territorio para las Islas Canarias, que son un centro fundamental en las rutas marítimas mundiales, desarrollado y defendido por España durante siglos.
– Entre los objetivos publicitados por Marruecos sobre su visita a los Estados Unidos está la petición de mayor ayuda económica y militar. En cuanto a la económica, no hay ninguna objeción pues se considera legítima y conveniente para la paz, desarrollo y estabilidad interna del país alahuita, en los cuales Franco manifiesta su interés, pero no en lo que respecta a la ayuda militar.
– El Gobierno estadounidense ya es consciente de la constante preocupación española de la carrera armamentística que tiene lugar en el Norte de Africa por parte de Marruecos con la intención de amenazar la paz y satisfacer ambiciones imperialistas con conflictos con los países vecinos.
– El General Franco destaca al Presidente de los Estados Unidos que nadie está amenazando las fronteras de Marruecos, Nación que tiene suficientes armas para garantizar su defensa y su paz y seguridad interiores y señala que hacía pocos años que España había sufrido la agresión de bandas armadas por Marruecos que utilizó para alterar la paz en los territorios de Sidi-Ifni y Sáhara y que en el momento de la redacción de la carta España se sentía alarmada por sus intentos de conseguir más armas a la par que incita en su población un espíritu belicista.
– El General Franco señala la incongruencia que supone que mientras las necesidades económicas de Marruecos están en su peor momento, manifiesten su deseo de dedicar recursos militares mucho más allá de sus posibilidades, en la esperanza de que otra Nación se los financie.
– El General Franco señala al Presidente de los Estados Unidos que desde ningún punto de vista desde la auto-defensa se puede justificar dicha ayuda militar solicitada por Marruecos.
Cuando uno lee esta carta se da cuenta de que el General Franco sí que sabía de geoestrategia y se pregunta hasta qué punto en el momento actual carecemos en las más altas instancias de dicho conocimiento esencial.
Cuando vemos la Ciudad de Ceuta asaltada, cuando vemos a las Islas Canarias tan desprotegidas, cuando vemos el creciente rearme del Reino Alahuita, cuando vemos la traición que cometimos contra el Pueblo Saharaui al abandonarles incumpliendo nuestros propios compromisos y la legislación internacional, cuando vemos el problema energético que supone para España el conflicto entre Argelia y Marruecos, y muchas cosas más, podemos poner en valor la carta enviada por Franco a Johson en 1967, para señalar que la política hostil de Marruecos hacia España data de mucho más allá de medio Siglo transcurrido y que si entonces sí que éramos en España conscientes y tomábamos medidas estratégicas, en el momento actual carecemos de la visión y del poder de actuación que demostró Franco con los Estados Unidos en 1967.
Guillermo Rocafort
Analista Internacional