Aunque el colectivo de los pensionistas es uno de los mayores caladeros de votos del presidente del Gobierno y su partido, muchas veces no son conscientes de que este personaje y todo su equipo está jugando de forma permanente con ellos.

Les aseguran que, si llega la derecha al poder, se va a cargar el tema de las pensiones cuando aquí el único que hizo algo en contra de sus intereses fue José Luis Rodríguez Zapatero que, en mayo de 2010, anuncio una congelación de estas junto a una bajada de los salarios de los empleados públicos. Es cierto que no lo hizo porque le apetecía, sino obligado por Bruselas para tratar de reducir el déficit galopante que tenía el Estado español.

Parece que nos olvidamos de que estamos en una situación parecida en cuanto al déficit que tenemos en estos momentos porque, aunque hayan enviado a Bruselas un déficit de 18.000 millones, no pueden ocultar que la deuda se les ha disparado en 52.000 millones de euros, que no cuadra por ningún lado con el déficit oficial y en algún momento les va a explotar en las manos todas las manipulaciones que hacen sobre la Contabilidad Nacional.

Lo primero que deberían de hacer los pensionistas es protestar, por la retención del IRPF, porque hoy lo que están cobrando es su aportación para un día poder cobrar su pensión y que ya tuvo su retención impositiva y, por lo tanto, lo que están es sufriendo una doble imposición real, pagaron IRPF por su trabajo y vuelven a pagar por su pensión.

Pero es que encima de que ya les crujieron a impuestos en el pasado, son una fuente magnífica de recaudación para el ministerio de Hacienda y para ayudar a llenar sus arcas con este tributo.

La retención a cuentan que sufren los pensionistas españoles supone el 17,5 % de la recaudación total del IRPF, que en primer semestre de 2023 supuso meter en las cuentas de la Agencia Tributaria 8.731 millones de los 49.931 millones que recaudaron y ha pasado, a cierre del primer semestre de 2024, a 9.642 millones frente a una recaudación total de 55.247 millones. Para que tengan toda la información les he preparado este cuadro:

Pero si ya es un ataque a todos los principios de la igualdad que esto suceda, todavía lo es más que la renta de pensiones sujeta a retención suba un 6,7 %, porque hay nuevos pensionistas que han entrado en el sistema, pero lo que se recaude suba un 10,4 %.

En el primer semestre de 2023, la renta recibida por los pensionistas españoles ascendió, incluyendo a las clases pasivas del estado (funcionarios), a 90.016 millones de euros y en primer semestre de 2024 subió por el efecto de la revalorización de las pensiones y de la incorporación de nuevos pensionistas a 96.004 millones, lo que supone que lo que está pagando el Estado español y, por lo tanto, el ingreso bruto que reciben este conjunto de personas, un 6,7 % más.

Ahora bien, la subida de las pensiones, como consecuencia de que hay nuevos pensionistas que cobran más y que otros con la subida saltan de tramo, la retención media pasa del 9,7 % al 10 %. Así, el dinero que ingresa Hacienda sube un 10,4 %.

Pedro Sánchez, María Jesús Montero y todo el Gobierno se frotan las manos porque todos callan y, por lo tanto, otorgan. Nadie protesta, pero sobre todo porque muchos no se enteran de que se están aprovechando de ellos.

Pero, por desgracia, esto es así, porque un gobierno «progresista» es aquel que de verdad a quien hace más pobre es a los pobres y más ricos a los que ya lo eran y además ellos pasan a estar en esa clase. Así que mis queridos pensionistas que sepan que les están metiendo mano en el bolsillo de forma descarada, con intención de quitarles lo que es suyo y, lo que es peor, que muchos de ustedes no se dan cuenta.