El Gobierno aumenta un 25% el gasto en Defensa y Podemos estalla: “Nos lo han ocultado, es una vergüenza, pero no vamos a romper”
Echenique asegura que el PSOE no comunicó a su formación el incremento de la inversión militar
Sí, habrá aumento en el gasto en Defensa en los Presupuestos de 2023. Pese a la disputa interna entre los socios de gobierno, donde Unidas Podemos rechazaba esta subida, finalmente el anteproyecto de cuentas públicas refleja un incremento de hasta el 8% teniendo en cuenta los fondos europeos, de un 6% sin tener en cuenta estas ayudas. El gasto pasa de 9.791 millones en 2022 a 12.317 millones para 2023 como cómputo global. En ese marco, el Ejecutivo destinará 4.900 millones a los planes especiales de modernización, también llamados planes especiales de armamento. Incluyendo éstos, que no computan en el límite de gasto no financiero, la inversión en Defensa crecería hasta un 25%.
Ha sido uno de los puntos de fricción, de choque entre los socios. En la primera reunión, en agosto, entre PSOE y Unidas Podemos para negociar los Presupuestos, la delegación morada dejó ya sentado que rechazaban un incremento en el gasto en Defensa. Pero en el sector socialista tenían claro que era imperativo cumplir con los compromisos adquiridos por Pedro Sánchez con Europa y la OTAN, de llegar al 2% del PIB en 2029 e ir incrementando la partida cada año.
El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha asegurado en Twitter que el PSOE ha “ocultado” a su formación “el aumento unilateral en el gasto en defensa”, algo que no ha dudado de calificar como “vergüenza”. No obstante, ha garantizado que la colación de Gobierno no se va a romper por esta circunstancia.
La secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha salido al paso de la situación en un vídeo en el que destaca que desde su partido se han “opuesto frontalmente en esta negociación a cualquier aumento del gasto militar”. Sin embargo, ha asumido que mientras no sean “la parte mayoritaria del Gobierno” tienen más difícil convertir esa “cabezonería” en una “realidad”. Así, la ministra de Podemos ha advertido de que esta subida “pone mucho más difícil revalidar la mayoría progresista” que sostiene al Gobierno.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha hablado en el pleno del Senado sobre la subida del presupuesto a Defensa. “España va a cumplir con el compromiso asumido: llegar al 2% del PIB en el año 29. Vamos a cumplir porque somos serios y creemos profundamente en España”.
“Los compromisos del presidente se cumplen”, ha dicho, por su parte, María Jesús Montero, ministra de Hacienda, tras el Consejo de Ministros que ha aprobado el anteproyecto de Presupuestos. Y ha aprovechado para lanzar un claro mensaje a sus socios de Unidas Podemos, anticipándose a críticas o posible malestar: ha desgranado que mientras Defensa sube un 6% los ministerios de Podemos lo hacen en mayor cantidad. En concreto, el presupuesto de Derechos Sociales sube un 18% y el de Igualdad un 14%.
La argumentación de la ministra de Hacienda va encaminada a tratar de desactivar el discurso de todos sus socios, de gobierno y de gobernabilidad, de que se destina dinero a Defensa cuando debería destinarse a otras partidas. El PSOE quiere explicitar que no se ha detraído dinero de las partidas sociales, y para ello pone el foco en los propios ministerios de Podemos, que crecen.
Este aumento del gasto en Defensa se estructura en una parte importante por el aumento de la masa salarial de los militares -motivado por la subida de la masa salarial de los militares-, pero el Gobierno también aumenta el dinero que destinará a los planes especiales de modernización. En concreto, se destinarán, según Hacienda, 4.900 millones.
Como ha venido informando este diario, ésta era otra vía de La Moncloa para incrementar el gasto militar. En 2022, el dinero destinado a estos programas especiales de modernización ascendió a 2.848 millones, cuando el dinero presupuestado en 2020 fue de 2.164 millones, y en 2021 de 2.341 millones. Es decir, esta partida ha crecido en cada proyecto de cuentas públicas de Pedro Sánchez.
Los planes especiales de armamento (PEA) figuran en los Presupuestos, en concreto dentro del apartado de «Gastos. Presupuesto por programas y memoria de objetivos», enmarcados en la «Sección 14. Ministerio de Defensa», y ahí bajo el epígrafe «Memoria de objetivos de los programas del sector» se encuentra el apartado «Programa 122B. Programas especiales de modernización». Programas especiales de modernización y planes especiales de armamento responden a lo mismo. Hacienda defiende que no computan en el límite de gasto no financiero para tratar de sortear el rechazo de Unidas Podemos y de socios de gobernabilidad como ERC o Bildu, entre otros.
Entre los últimos programas esenciales de armamento a los que el Gobierno ha presupuestado partidas importantes se encuentra el submarino S-80 (340 millones para las cuentas de 2020), el vehículo de combate sobre ruedas 8×8 (30 millones), el helicóptero NH-90 (250 millones), las fragatas F-110 (131 millones), los aviones de combate EF 2000 (593,8 millones) o los tanques Leopard (267,7 millones).
Sumando estos planes de armamento al aumento del presupuesto en Defensa, el incremento total sería del 25,8%. Desde Hacienda defienden que estas inversiones permitirán generar, según sus cálculos, hasta 22.667 empleos, y desgranan que es un dinero que además de estimular la industria nacional -con compañías como Indra, Airbus…-, suponen una palanca para la creación de “tecnologías híbridas con un alto valor añadido de conocimiento” y permite invertir “en tecnología i+d+i en sector de vanguardia que son punta de lanza para otras áreas”. Quiere haciendo desmitificar esa “visión militarista” del gasto en Defensa.