“OTAN Y EL ÁRTICO”

OTAN SE ESFUERZA EN LA ZONA ÁNTÁRTICA

NATO Secretary General Jens Stoltenberg and the Prime Minister of Canada Justin Trudeau during their press conference at the Royal Canadian Air Force base in Cold Lake.

La brutal Guerra de Rusia contra Ucrania ha cambiado las reglas de juego para la seguridad mundial. Demuestra que no podemos dar por sentada nuestra seguridad –en ningún lugar-. OTAN ha respondido con unidad y resolución, determinada a apoyar a Ucrania y mantener seguros a nuestros mil millones de habitantes –por doquier-,

Esta semana visito el Ártico canadiense con el primer ministro Justin Trudeau para subrayar la importancia estratégica de la región para la seguridad euroatlántica. El trayecto más corto a América del Norte para los misiles y bombarderos rusos sería sobre el Polo Norte. Esto hace vital el papel de NORAD para América del Norte y OTAN. Por tanto, espero visitar el Sistema de Alarma del Norte –una instalación de radar de alerta temprana- en Cambridge Bay, Nunavut. Visitaremos también la fuerza aérea táctica mundial de cazas de Canadá en la base aérea de Cold Lake.

En Cambridge Bay visitaremos también la Estación de Investigación del Ártico Norte canadiense y veremos a los miembros de los ejércitos canadienses desplegados en al Ártico como parte de la Operación Nanook que incluye patrullas marítimas con participantes daneses, franceses y EEUU.

Canadá contribuye a nuestra seguridad de muchas maneras, no siendo la menor en el Ártico. Los Exploradores canadienses, ‘ojos y oídos’ en la región, enseñan prácticas vitales de supervivencia a otras tropas de OTAN. Canadá acogerá también un Centro de Excelencia OTAN sobre cambio climático y seguridad, como pare de nuestros incrementaos esfuerzos para tratar el cambio climático incluida esta región vital.

OTAN es una alianza defensiva. Nuestro propósito es prevenir conflictos  mantener la paz. Gran parte de la zona antártica (territorio y aguas antárticas) ha sido tradicionalmente un área de bajas tensiones. Sin embargo, lamentablemente, esto está cambiando debido al clima en rápido calentamiento y creciente competencia mundial. Partes cada vez mayores del Ártico se verán libres de hielo en verano. Esto abre las oportunidades para rutas marítimas, recursos naturales y desarrollo económico. Pero también aumenta el riesgo de tensiones. Los regímenes autoritarios tienen clara voluntad de usar la intimidación militar o la agresión para lograr sus objetivos. Al mismo tiempo, están aumentando sus actividades e intereses en el Ártico.

Rusia ha aumentado significativamente su actividad militar en los últimos años, creando un nuevo Mando del Ártico, abriendo cientos de nuevas y anteriormente soviéticas bases militares, incluyendo aeródromos y puertos y usando la región como campo de pruebas de nuevos sistemas de armamento. El mes pasado, el presidente ruso Vladimir Putin estableció una nueva estrategia naval que intenta proteger las aguas del Ártico “por todos los medios”, incluyendo una creciente actividad en el archipiélago no militarizado noruego de Svalbard y sistemas de misiles hipersónicos Zircon para su Flota del Norte. Justo la semana pasada Rusia desveló planes para un nuevo submarino estratégico portamisiles para las operaciones en el Ártico. La capacidad de Rusia para obstaculizar el refuerzo aliado en el Atlántico Norte es un problema estratégico para la Alianza.

China está también ampliando su presencia, declarándose un “estado próximo al Ártico” y planeando una “Ruta de Seda Polar” que una China con Europa vía el Ártico. Está reforzando rápidamente su flota con planes para construir el rompehielos más grande del mundo. China está también invirtiendo decenas de millones de dólares en proyectos de energía, infraestructuras e investigación en la región. A principios de este año Pekín y Moscú se comprometieron a intensificar la cooperación práctica en el Ártico como parte de una profunda asociación estratégica que desafía a nuestros valores e intereses.

OTAN tiene un claro interés en mantener la seguridad, estabilidad y cooperación en la zona polar. El Ártico es la puerta al Atlántico Norte, acoge unos enlaces vitales de comercio, transporte y comunicaciones entre Norteamérica y Europa. Para nuestra fortaleza económica y seguridad de nuestros habitantes es fundamental asegurar la libertad de navegación y acceso sin dificultades. Una vez que Finlandia y Suecia se unan a OTAN siete de los ocho países del Ártico serán miembros de ella. Su pertenencia mejorará significativamente nuestra postura en la zona polar y nuestra capacidad para reforzar a nuestros aliados bálticos.

OTAN está aumentando su presencia en la zona polar. Un nuevo Mando asegura que las líneas marítimas de comunicación siguen libres y seguras. Los aliados, incluyendo Canadá, investigan nuevas capacidades aéreas y marítimas. OTAN y sus aliados realizan rutinariamente maniobras en al Ártico y antisubmarinas para asegurar que seguimos prestos a operar en todas las condiciones y defender de toda amenaza cada centímetro cuadrado de territorio ártico. Dos de las mayores maniobras en los últimos años –Trident y Cold Response- fueron en la zona polar.

En este mundo más peligroso y competitivo OTAN aumenta su presencia y vigilancia en la Alianza, incluyendo la zona polar. Con fortaleza y unidad seguiremos disuadiendo las agresiones, protegiendo nuestros valores e intereses y manteniendo segura a nuestra gente.

NATO Update 24 de agosto de 2022

Por la trascripción:

Leopoldo Muñoz Sánchez

Coronel de intendencia ET (R)